Esta mañana hemos quedado unos cuantos para dar una vuelta motera por esas sierras abulenses. Previamente hemos estado por la zona toledana aledaña. Los del sur de Madrid y norte de Toledo hemos quedado en la gasolinera de Griñón a las 8:30. Los toledanos que han venido (Rafa y Fernando) lo hicieron en el Kiosco Catalino. Hemos quedado en juntarnos en Escalona y desde ahí hacer la ruta conjuntamente. He elegido bastante mal una parte del camino porque era eso, camino. Las motos de Edu y de Fernando se movían perfectamente por ahí, pero el resto ... ¡qué saltos! Ni que fuésemos sobre un toro americano de esos de los rodeos.
Como habían quedado Gabo en llevar cigarros puros cubanos y Rafa güisqui, hemos hecho un alto subiendo al puerto de Mijares que hay una zona habilitada a tal fin. No para fumar y beber, si no para parar y si se quiere, pasar allí el día. Tiene barbacoas, mesas con asientos de granito, sombra y un arroyuelo que ahora baja prácticamente seco.
Ahí finalmente hemos estado un buen rato pero con buen criterio, aunque por un traguillo no hubiera pasado nada, el güisqui volvió intacto.
Una vez reemprendida la marcha, ya no pararíamos hasta las despedidas, primero a los de Toledo en San Martín de Valdeiglesias y luego el resto ya en Griñón.
Salvo el calor final, todo bien. La rueda de mi moto, fatal, ha muerto, D.E.P. Buena cubierta la PR3 hasta el momento de su fallecimiento siempre fue buena conmigo, lástima de vida tan efímera.
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