Fotografías de Raquel
Sábado por la tarde, mensaje en el móvil de tío LuisMi: mañana ruta "con bañador" y a comer a casita, la cosa prometía, posteriormente hablamos, me explica la ruta prevista y donde nos chapuzaríamos una mijilla y me dije lo que a la mañana siguiente les comenté a los demás, "LuisMi quiere poner demasiado arroz para tan poco pollo". Una ruta larga muy apañá, con curvas, curvas y curvas. Los de estos barrios, Edu, Jorge y
yo quedamos con Pablo y Raquel en Griñón a las 8 de la mañana, con LuisMi y Rafa (otro más, con BMW GT) en el cruce de la carretera cercana a Cadalso de los Vidrios en torno a las 9:00. Una vez agrupados, comentamos la ruta, vemos que es un poco "ansiosa" pero decidimos que ... palante.
Se había previsto un pelín de calor, cosa que comenzó bien pronto a ponerse de manifiesto. La lumbalgia que me llevaba dando la lata toda la semana se acentuaba proporcionalmente a los kilómetros recorridos. Subida hacia Mijares con Edu, LuisMi y Jorge que perdían el culo, de hecho yo tuve que esquivar uno que había en medio de la carretera, no conseguir identificar de cual de los tres era. Parada en el alto de Mijares, la parte baja de mi espalda, junto con la parte alta de mis piernas un "sinvivir", no había postura humana que fuese buena ... y lo que quedaba, ¡paqué, paqué!.
Bajando del puerto de Mijares decidí a pesar de la dolorina unirme al grupo de los ligeros, Rafa a la cabeza casi rozaba con las maletas por el suelo, LuisMi que me precedía igualmente. En el cruce que nos teníamos que desviar hacia Navarrevisca, el calor mezclado con el dolor de espalda me hicieron ir un poco más despacio con los pies en las estriberas traseras para ver si estirando un poco "todo el conjunto", se mitigaba la cosa, pero tampoco funcionaba, iba hecho "porvico". Solución final, si no puedes con el enemigo ... a correr otra vez detrás de los "desbocaos" con concentración única y exclusivamene en la conducción, así se olvidaba un poco el asunto.
Llegamos a Gisando, la meta prevista, un sitio la mar de chulo, con una zona habilitada para el baño idílica, el agua como a mí me gusta, transparente con el color azul-verdoso ..., a prepararse para el baño, todos listos y ... "tú no te metas con la espalda así que el agua tan fría te puede fastidiar aún más", por si acaso eso era posible, les hice caso. El calor ya ... mejor no comentar, la cosa ya era preocupante, fuí al aseo y al soltar la cremallera creí que me había tragado "La Cheff", sonó como "cuidado, soltando vapor". Con el pantalón del traje de moto, negro y ese sol ...
Pero había que regresar y por la hora, teníamos que hacerlo "a escape", así que sin andar con tonterías ni paradas para relajación, emprendimos la vuelta por la A-5 para tratar de acelerar la llegada y que las familias no estuviesen de uñas a nuestra llegada.
Conclusión del día:
Bien soleado, los de las BMW GT y los relajaos ... mu rápidos, Pablo y Raquel a su ritmo de sin prisa excesiva y sin pausa y yo entre dos aguas. La compañía, para que comentar, si nos juntamos así es porque somos todos muy afines, así que sobran los comentarios al respecto. El sitio al que nos llevó LuisMi, chulísimo, mi dolor de espalda espectacular y la llegada a casa gloriosa para quitarse la ropa que ardía y decir aquello de ... ¡caaaasa!. Moló todo menos mi lumbalgia y el caloracísimo tan burrísimo.
Ah, un consejo, siempre que podáis haceros acompañar por Pablo y Raquel, que aparte de lo buenísima gente que son y lo grato de su compañía, en su BMW puedes encontrar lo que necesites, café, bebidas frías, algo de picoteo (si la ruta es corta, si es para comer por ahí, aquello es un "buffet libre", varios primeros, varios segundos y postres a elegir, ojo, con mantel para la mesa y cubertería de plata) y si necesitas medicinas, también, para dolor de cabeza, para picaduras, cremas solares ... En esa moto hay de todo, parece que la ha preparado un chino de esos que montan los mini-supermercados de barrio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario